Francisco De la Fuente y su esposa Lidia viven una vida sin sobresaltos en una de las urbanizaciones del municipio alicantino de Calpe. Su tranquilidad se ha visto truncada recientemente al recibir una factura de Iberdrola por casi 6.400 euros.
A la sorpresa de este matrimonio de jubilados siguió la indignación. Según cuentan, hacía más de tres años que la compañía no se acercaba al domicilio a revisar su contador y a pesar de ello, la familia pagaba religiosamente las facturas mensuales, que correspondían a un consumo estimado. "Mi marido, que es ordenado hasta la saciedad, guarda todas las facturas. Unas han sido de 20 euros, otras casi de 100 euros...hasta que de repente nos llamaron el pasado mes de octubre del banco para avisarnos de que había un cargo por casi 6.400 euros de luz", explica Lidia.
Al parecer, esta última factura corresponde a una lectura real de los últimos años, concepto al que se le ha añadido el IVA. "A mi me parece bien que si no han cobrado la luz en todo este tiempo nos pasen el recibo acumulatorio, pero no nos han descontado ni un céntimo de todo lo que hemos estado pagando durante este tiempo", añade la esposa de Francisco De la Fuente.
Este ha tenido que pedir un préstamo para hacer frente a las cantidades que se le reclaman. La pareja ha acudido también a la Oficina del Consumidor y ha establecido contacto con Iberdrola para obtener explicaciones, sin obtener respuesta. "Nos dicen que lo sienten mucho pero que no pueden hacer nada más que pagar", explican.
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