Ayer si hizo público el fallecimiento del líder del país mas hermético del mundo: Corea del Norte. Kim Jong Il murió el sábado por un fallo cardíaco, pero la noticia tardó un poco en hacerse oficial. Supongo que quizás querían asegurarse de que estaba muerto o resucitaba, dada la veneración que le tenía su pueblo y los mitos alrededor de su persona.
Según la creencia popular y confirmado por fuentes oficiales, el dictador escribió seis operas en dos años. Y no solo tenia dotes de compositor, sino también de deportista. En su primer partido de golf, consiguió 11 hole-in-one (de un solo golpe). Y memoria tenía mucha, tanta como para recordar los 18.000 libros que escribió su padre, palabra por palabra. Su padre vivió 82 años, así que tuvo que escribir unos 220 libros cada año.
Su nacimiento fue anunciado por una golondrina, y en el momento de nacer apareció una estrella nueva en el cielo, y un doble arco iris. Con todo este panorama, no es de extrañar que su muerte haya sido una gran catástrofe nacional. Veremos que tal lo hace su sucesor, que al ser su hijo me imagino que vendrá a ser mas de lo mismo.
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