La prensa la conoce ya como 'Nuestra señora del ausentismo'. El caso de Silvia S., una italiana de 44 años, se ha convertido en célebre en su país después de que se descubriera que había inventado enfermedades y embarazos para acudir a su puesto de trabajo tan sólo seis días en nueve años.
Ha sido una investigación de los carabineros la que ha logrado desenmascarar la impactante estafa que, durante casi una década, esta audaz señora cometió contra el Estado, según informan medios locales.
Identificada como Silvia S., empleada del Policlínico Universitario Sant'Orsola Malpighi de Bologna (al centro de Italia), la mujer, que tiene una hija de 10 años y que quedó bajo arresto domiciliario, prácticamente nunca fue a trabajar, salvo 6 días en 9 años.
La señora, una 'maga de la estafa', comenzó a ausentarse primero debido a presuntas enfermedades profesionales: al parecer, una dermatitis debida al contacto con agentes químicos en el trabajo. Sin ningún tipo de pudor, fingiéndose, además, psicológa, la mujer obtuvo los certificados médicos correspondientes a esos padeceres.
Después comenzaron las ausencias por dos embarazos que, según otros certificados presentados por la mujer -por supuesto, falsos-, la obligaron a ausentarse por estar bajo riesgo. Silvia S. también logró los certificados que, más adelante, demostraron que había dado a luz dos hijos que nunca tuvo: uno en febrero de 2004 y el otro, en octubre de 2009, al parecer, en España.
Tal como puede leerse hoy en todos los diarios italianos, más allá de no haber ido a trabajar nunca en nueve años, la mujer hasta utilizó a sus dos hijos inventados para pagar menos impuestos, en un daño al fisco calculado en 33.117 euros. Acusada de estafa agravada y falso ideológico, Silvia S. corre el riesgo de ser condenada a ir a la cárcel. La pena podría ser de entre uno y cinco años, para el primer caso, y dos años de prisión, para el segundo.
Fuente: terra
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